AVANCES. Las “Warmi Kewiñas” transforman el paisaje y lideran la restauración ecológica en Cochabamba.
«Nuestro Poder, Nuestro Planeta» fue el lema del Día de la Tierra 2025 y Acción Andina lo celebró alcanzando un hito: la plantación de más de un millón de árboles nativos en ecosistemas altoandinos, gracias al trabajo conjunto de la Asociación Civil Armonía, gobiernos municipales y comunidades locales.
Acción Andina presentó los avances en este proyecto, que demuestra el poder transformador de las comunidades locales, las organizaciones comprometidas y cada individuo que cree en un futuro sostenible, un planeta más sano y resiliente.
A través de iniciativas como la de las Warmi Kewiñas de la organización Faunagua, mujeres líderes en viveros comunitarios que, además de restaurar bosques, están transformando sus territorios mediante la siembra de Polylepis sp. y otras especias nativas, empoderando a sus comunidades y jugando un rol clave en la regulación del agua y captura de carbono. Además, se sumó como aliado a Prometa.
Bolivia forma parte de un esfuerzo regional que ha restaurado más de 6.000 hectáreas y sembrado alrededor de 12 millones de árboles en los Andes. La meta nacional para la temporada 2025-26 es aumentar en al menos 300.000 árboles.
“Creemos firmemente que el poder para cambiar el planeta está en manos de quienes lo habitan y lo conocen. Nuestra esencia es la restauración comunitaria para un planeta más sano y resiliente, construyendo desde las comunidades locales un modelo replicable de acción climática y protección de la biodiversidad”, afirmó Constantino Aucca Chutas, presidente de Acción Andina.
Impacto regional
Hasta la fecha, el programa ha superado los 12 millones de árboles plantados en los Andes. La meta para finales de 2026 es de al menos 2 millones de árboles adicionales, distribuidos entre Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú.
Cada país tiene metas adaptadas al contexto y capacidad de socios locales. En Bolivia, el trabajo se ha desarrollado en ecosistemas en Cochabamba, áreas aledañas al Parque Tunari y recientemente Tarija.
La entidad explicó que cada proyecto de Acción Andina se ejecuta en estrecha colaboración con las comunidades locales, rescatando los saberes ancestrales y garantizando que los beneficios sean compartidos. Las mujeres tienen un rol protagónico en varios países, liderando procesos de viveros y toma de decisiones.
“En Bolivia, gracias a las Warmi Kewiñas, un grupo de mujeres que lideran viveros comunitarios de la organización Faunagua, el cambio ha sido palpable. Este grupo ha demostrado que restaurar la naturaleza también empodera a las personas», afirmó Aucca.
Agregó que «en Perú, comunidades como Pampacorral han recuperado áreas degradadas, mejorando la disponibilidad de agua. En Argentina, jóvenes rurales se han capacitado para liderar la producción de árboles nativos. Estas historias reflejan cómo la restauración ecológica impulsa también el bienestar social”.
Por ello, en el Día de la Tierra, Acción Andina reiteró las oportunidades de colaboración con empresas mediante programas de reforestación corporativa y alianzas de responsabilidad social empresarial, a través de prácticas sostenibles que apoyan la reforestación comunitaria y la promoción de energías renovables.